Ruta de Otoño 5: La Tahá de Pitres, la Sinfonía Morisca Alpujarreña.

Esta ruta nos permite acercarnos a la Alpujarra Granadina, algo que siempre es un espectáculo maravilloso, más aún si nos encontramos en otoño, en el que el color de los castaños centenarios, de quejigos y robles ponen el especial contrapunto al paisaje.

Pasear por las estrechas calles, bajo los umbríos tinaos y junto a las inmaculadas fachadas de cal, salpicadas de multitud de bien cuidadas macetas, siempre es un goce para los sentidos y hace que el senderismo alcance una de sus máximas cotas de interés.

Iniciamos esta ruta desde el centro neurálgico de la localidad de Pórtugos, en el aparcamiento que hay entre el Ayuntamiento y la iglesia parroquial. Desde allí parte un sendero que de forma continuada sube, pasando entre impresionantes castaños centenarios hasta la localidad de Capilerilla, caminando, una vez cogida altura, junto a una acequia morisca y teniendo que superar el barranco del rio Bermejo, algo que repetiremos en otras ocasionales y a otros niveles inferiores.

Capilerilla, es un claro ejemplo de construcción alpujarreña, calles estrechas, sinuosas, tinaos y huertos-vergel, salpicados entre monte bajo, quejigos, robles y castaños. No faltan los lavaderos y fuentes, algo que será constante en todo el recorrido.

Descendemos hasta Pitres por el antiquísimo Camino de Pitres, empinado y enmarcado entre espesa arboleda, para llegar a la "bárbara" población y disfrutando de su gran plaza e iglesia. Antes de despedirnos de Pitres, nos sorprende la leyenda que explica porqué Pitres tiene un ancla en su entrada.

Desde Pitres, nos metemos de lleno en los pueblos de La Taha, tomando ahora el camino, también en fuerte descenso, con empinadas y pedregosas escaleras, que finalmente nos llevan consecutivamente hasta Mecina Fondales, Mecinilla, Fondales y posteriormente a Ferreirola.

Casas blancas, paisaje abrupto, terrazas frondosas, vegetación espectacular, senderos y caminos ancestrales, esa es la constante que nos rodea.

En Ferreirola, iniciamos ahora un tramo del sendero medieval, caminos de herradura y de ganado que se usaban por los antiguos pobladores para intercomunicar las diferentes localidades alpujarreñas.

Acequias y fuentes ferruginosas y carbonatadas  nos dan escolta y alegran el caminar, hasta llegar a la gran Era del Trance, magnífico mirador hacia el profundo y abrupto barranco por el que transcurre caudaloso el rio Trevelez.

Fuente La Gaseosa

Pronto accedemos en fuerte pendiente hasta la localidad de Busquístar, punto de inflexión de la ruta, para regresar primero por carretera y luego por el GR-7 hasta las afueras de Pórtugos, pasando junto a la popular Fuente Agria y Ermita de Nuestra Señora de las Angustias, llegando de vuelta a nuestro punto de inicio, en donde un sabrosísimo Puchero de Hinojos pone acento final a la ruta.

Puchero de Hinojos

Datos de la ruta:
- Senderistas: 4 y la perrita Balto.
- Recorrido: 12,4 kms, circular, de dificultad Media.
- Acumulado: 665 m subiendo; 656 m bajando.
- Tiempo en movimiento: 4 h 25 min; detenido, 1h 56 min
- Media: 3 kms/h
- Índice de dificultad IBP, 63. Ver más datos IBP aquí>>>

Track de la ruta: 

Powered by Wikiloc

Ver todas las fotos de la ruta aquí>>>

Con esta ruta de otoño número 5, damos por concluida esta serie de rutas por las que nos hemos dedicado a recorrer parajes que adquieren una especial belleza en esta estación del año. Ahora habrá que esperar hasta la próxima.